El mundo del videojuego es un campo de batalla donde incluso los títulos más prometedores pueden caer en combate. Esta vez, la víctima es Metro Awakening, la nueva entrega de la popular saga Metro, que, a pesar de su atmósfera postapocalíptica envolvente y buenas críticas, no ha logrado el impacto financiero esperado. ¿Qué pasó? Vamos a destriparlo.
Un viaje en el metro que no llenó los vagones
Embracer Group, la gigantesca compañía dueña de medio universo gamer (o al menos eso parece últimamente), ha confesado en su informe financiero más reciente que Metro Awakening no ha vendido como esperaban. Y no hablamos de un “bueno, vendimos menos de lo previsto, pero sigue siendo rentable”, sino de un verdadero tropiezo económico.
Esto es particularmente preocupante en un mercado donde la realidad virtual sigue luchando por establecerse como una plataforma de masas. Aunque títulos como Half-Life: Alyx han demostrado que hay demanda para experiencias AAA en VR, no todos los jugadores están dispuestos a desembolsar cientos de euros en un visor para disfrutar de un solo juego.
¿Qué ofrece Metro Awakening y por qué no triunfó?
Desarrollado por Vertigo Games, el estudio detrás de éxitos como Arizona Sunshine, Metro Awakening prometía una experiencia de supervivencia y exploración en primera persona ambientada en el oscuro y claustrofóbico metro de Moscú. Su jugabilidad inmersiva y narrativa cautivadora hicieron que muchos críticos lo aplaudieran, e incluso se llevó el premio al Juego de Realidad Virtual del Año en Steam.
Sin embargo, aquí viene el problema: el mercado de VR sigue siendo un nicho en comparación con los juegos tradicionales. No basta con que un título sea bueno; necesita atraer a suficientes jugadores con visores como Meta Quest 3, PSVR 2 o PCVR para ser rentable. Y parece que la gente no se ha lanzado en masa a los túneles radiactivos de Moscú.
El gran golpe para Embracer Group
La compañía sueca, que en los últimos años ha comprado estudios y franquicias como si estuviera en una feria de ofertas, no está en su mejor momento. En su informe financiero del tercer trimestre de 2024, Embracer reveló que sus ingresos han bajado un 50% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Aunque otros juegos como Let’s Sing 2025, Legacy of Kain: Soul Reaver Remastered y Goat Simulator Remastered han contribuido a las arcas de la compañía, no han logrado compensar las pérdidas.
No olvidemos que Embracer ha estado en un proceso de reestructuración tras sus adquisiciones masivas. El año pasado ya se deshicieron de algunos estudios y cancelaron proyectos. Ahora, con Metro Awakening rindiendo por debajo de lo esperado, es posible que la empresa replantee su estrategia con la realidad virtual.
¿El problema es la VR o la estrategia de Embracer?
El caso de Metro Awakening reabre el debate sobre el estado de la realidad virtual en los videojuegos. Si bien cada vez más compañías apuestan por el formato, sigue sin ser la primera opción de la mayoría de los jugadores.
Tal vez el problema no sea tanto la calidad del juego, sino la falta de un público masivo dispuesto a invertir en visores VR y, además, en un juego que, aunque bueno, no cuenta con el mismo impacto mediático que otros títulos.
Por otro lado, Embracer podría haber calculado mal el potencial de ventas. La empresa ha tenido problemas en los últimos años con su modelo de compras y fusiones, y Metro Awakening podría ser solo otro síntoma de que no todo lo que tocan se convierte en oro.
¿Qué sigue para Metro Awakening?
Aunque sus ventas iniciales no han sido las mejores, aún hay esperanza para Metro Awakening. El boca a boca, los descuentos y las futuras actualizaciones podrían ayudar a mejorar sus números. Además, su éxito en Steam demuestra que al menos quienes lo han jugado lo valoran.
Sin embargo, este fracaso comercial podría hacer que Embracer y otros estudios piensen dos veces antes de arriesgarse con un título VR en el futuro. Y eso sería una pena, porque el potencial de juegos como Metro Awakening para ofrecer experiencias únicas es innegable.
Mientras tanto, los jugadores seguirán eligiendo entre explorar un Moscú postapocalíptico en realidad virtual o simplemente esperar a que la industria VR sea más accesible. Y Embracer… bueno, ellos probablemente estén revisando sus cuentas con cara de “esto no salió como esperábamos”.
Si queréis saber más sobre este título, no os perdáis el análisis que hicimos en Generación XR donde se llevó una puntuación muy buena.
