Broken Spectre, análisis de una aventura de terror narrativa en realidad virtual.

Broken Spectre, análisis de una aventura de terror narrativa en realidad virtual.

Hace 25 años nuestro padre se fue a las montañas para no volver jamás. Ahora, sentimos que nos llama, y dice que volvamos a las misteriosas montañas en su busca.

Hoy os traemos un juego de terror un poco diferente a lo que estamos acostumbrados en realidad virtual. En esta ocasión es un juego de narrativa, de terror, con puzles, acertijos, y mucha tensión. Algo que nos ha encantado es que dejamos atrás el susto fácil para llevarnos de la mano con una historia inquietante llena de misterio que nos atrapó desde el primero minuto.

De los creadores de The Blair Witch Project, nos llega, Broken Spectre.

Historia de Broken Spectre

Como decíamos, tras encontrar un mensaje misterioso dejado por nuestro padre, volvemos a las montañas donde antaño pasaban, padre e hija, muchos momentos juntos. Tomaremos el control de Casey, una hija que hará cualquier cosa por encontrar a su padre desaparecido hace años.

Dejaremos la historia aquí para que seáis vosotros quienes vayan descubriendo las raíces del misterio, un juego que tiene la gran baza de contar con una historia vibrante, misteriosa y superinteresante, quizás sea su punto más fuerte.

Mecánicas y dificultad

Originalidad es la palabra que definirá el control del juego. Que mejor que para un juego inmersivo como este que usar tan solo nuestras manos, con este pequeño truco han aumentado la inmersión el doble o triple.

El juego se puede jugar íntegramente tan solo con nuestras manos, con las que podremos movernos, girar, coger cosas, soltarlas, tirarlas, y un largo etcétera.

Pero todo lo innovador puede salirte mal, o al menos, no tan bien, y es que en muchas ocasiones, el seguimiento no va lo fino que uno quisiera y puede resultar desesperante. Para que lo entendáis, para avanzar, miraremos a un punto de avance, como si de un teletransporte fuera u estiramos el brazo con la palma de la mano hacia arriba y al cerrar la mano, automáticamente avanza. Todo esto si lo capta el visor bien, porque en muchas ocasiones tienes que repetir la acción demasiadas veces y pareciera que estuviéramos usando unas castañuelas.

Lo mismo para girar a derecha o izquierda, cuando no lo ve bien, te gira a donde le da la gana con el correspondiente enfado por nuestra parte.

Deciros que para disfrutar plenamente del juego, al final optamos por los controladores.

Por otro lado, la dificultad es muy liviana, como dicen sus desarrolladores, es una historia narrativa y salvo algún que otro pequeño puzle, no tendremos el más mínimo problema para poder avanzar.

Gráficos y banda sonora

El aspecto gráfico es un tema curioso en principio. Nada más comenzar nos encontramos con un juego gráficamente sencillo, basto en detalles y que decepciona, pero a medida que avanzamos, todo esto pasa a un segundo plano y nos dejamos embaucar por la trama y su sencillez, dando como resultado un aspecto cómic resolutivo que funciona.

Sigue siendo sencillo, pero es parte del encanto del juego, pero en ocasiones es un poco ridículo. Recordamos una escena con un tigre, creo, en una cueva, con el monstruo de la montaña, qué madre de dios… No decimos nada más y si lo probáis y lo veis, lo comentáis.

La banda sonora pasará desapercibida, ya que apenas cuenta en la experiencia, sin grandes atisbos y que ciertamente no consigues recordar conde había o no algo de música en el juego, y eso es señal de que no nos ha llamado la atención en ningún momento.

Conclusión

Entendámonos, por partes. Si miramos el juego por la novedosa experiencia de usar el seguimiento manual, mal vamos. Si analizamos el juego por su aspecto realista y sus detalles gráfico, otro suspenso. Pero si miramos y analizamos el juego como experiencia de terror, con pies y cabeza, con una historia interesante, fresca y aterradora, el juego es sublime.

Por fin tenemos un juego en realidad virtual de terror donde no buscan el susto fácil, en hacernos dar un sobresalto, no, esto es mucho más maduro, aquí se trata de hacernos pasar un mal rato sintiéndonos en la piel de Casey, que está desesperada por encontrar a su padre y es capaz de meterse en la boca del lobo.

No son las imágenes en sí, es el ambiente que crea el juego el que nos envuelve en una densa niebla de terror y angustia con unos diálogos interesantes. No mataremos a nadie, no hay menús complicados, aquí hay que leer, entender, explorar y comprender.

Es el juego ideal para amantes del género del terror donde verán con alegría una experiencia diferente al resto, al estilo de una muy buena película del género.

Por supuesto, es un juego muy recomendado por Generación XR.